Descripción
Gel hidratante y reparador vaginal de uso interno con ácido hialurónico al 1%, arginina y glicerol. Está especialmente indicado para aliviar los síntomas de la sequedad vaginal, atrofia y molestias relacionadas con el picor, el escozor y la dispareunia, producidas por reducción estrogénica, irritación física o química, anticonceptivos, medicamentos, etc. Su aplicación se recomienda también después de tratamientos de corrección de suelo pélvico, así como para mejorar la lubricación y facilitar las relaciones sexuales.
Modo de empleo
· Aplicar en el interior de la vagina con la ayuda del aplicador, previamente llenado con 2 ml.
· Se recomienda una aplicación dos o tres veces a la semana o puede utilizarse diariamente en caso de necesidad, preferentemente antes de acostarse.
· Después de cada aplicación, sacar el émbolo de la cánula y lavar con agua.
· Utilizar un aplicador para cada tubo.
Composición
AQUA / WATER, GLYCERIN, POLYSORBATE 20, SODIUM HYALURONATE, ARGININE, LACTIC ACID, PHENOXYETHANOL, ETHYLHEXYLGLYCERIN.
Consejo Farmacéutico
La sequedad vaginal es un problema benigno, pero molesto, que afecta a muchas personas. Puede aparecer a cualquier edad y originarse por diferentes causas: la disminución de estrógenos durante la menopausia, la etapa del postparto, la toma de ciertos medicamentos o tratamientos médicos, infecciones vaginales recurrentes, niveles muy altos de estrés…
Se debe a una disminución del flujo vaginal y suele haber un desequilibrio en la microbiota vaginal. Los síntomas que conlleva son sensación de tirantez, ardor, picores, o dolor, y suelen incrementarse durante las relaciones sexuales o al orinar.
Por un lado, es recomendable utilizar limpiadores con un pH compatible con el de la zona vulvar, para contribuir así a su equilibrio. Además, los hidratantes vulvares (externos) y vaginales (internos,) o vulvo-vaginales si sirven para ambas localizaciones, contribuyen a mantener la mucosa hidratada y confortable. Asimismo, el uso de lubricantes de base acuosa también puede facilitar las relaciones sexuales. Todos ellos son productos complementarios, cada uno tiene una función concreta. Siempre es aconsejable acompañar su uso con unos hábitos de higiene adecuados, una alimentación variada y que incluya grasas de calidad (aceite de oliva, frutos secos...), así como seguir las indicaciones de tu ginecólogo/a en cada situación concreta.
Si los síntomas no mejoran, consulta con tu ginecólogo/a.