Descripción
Crema protectora solar con factor 50, que ayuda a prevenir la sequedad cutánea. Su textura ligera, no grasa y con un agradable perfume proporciona una sensación de placer que se renueva con cada aplicación. Es un cuidado muy seguro, de gran tolerancia y de penetración rápida.
Modo de empleo
Antes de la exposición, aplicar una dosis generosa y homogénea para cubrir bien la zona expuesta al sol. Renovar la aplicación frecuentemente, sobre todo después de sudar, bañarse o secarse. Incluso con una buena protección se debe reducir la exposición al máximo. No exponer a bebés y niños pequeños directamente al sol.
Composición
INCI : Aqua (water), dicaprylyl carbonate, Uriage thermal spring water, methylene bis-benzotriazolyl tetramethylbutylphenol, butyl methoxydibenzoylmethane, ethylhexyl triazone, glycerin-nylon-12n=, triacontanyl PVP, decyl glucoside, butylene glycol, hydrogenated polydecene, C20-22 alkyl phosphate, C20-22 alcohols, glucose, xanthan gum, parfum (fragrance), chlorphenesin, benzoic acid, tetrasodium EDTA, tocopheryl acetate, o-cyman-5-ol, propylene glycol, trehalose, citric acid, sodium hydroxide, ascorbyl tetraisopalmitate.
Sin parabenos. Hipoalergénica.No comedogénica.
Reducir al máximo la exposición solar, incluso cuando se utilice protección. No exponer a los bebés ni a los niños pequeños directamente al sol. La lista de ingredientes puede variar. Se recomienda verificar siempre la lista que figura en el producto adquirido.
Consejo Farmacéutico
Para que la fotoprotección sea efectiva, recuerda que hay que aplicarla en cantidad suficiente, extenderla de manera homogénea y reaplicarla cada 2 horas, tras el baño o haber sudado. Junto al uso de la fotoprotección tópica, utiliza métodos de protección complementarios: accesorios como sombreros de ala, gafas de sol y ropa adecuada. Refuerza el cuidado de la piel con fotoprotección oral (en forma de complemento alimenticio) junto a una dieta equilibrada. Evita la exposición durante las horas centrales del día (entre las 12:00 y las 16:00). No expongas a los bebés y niños pequeños a la luz solar directa. La sobreexposición produce daño oxidativo, es causa de fotoenvejecimiento y favorece la aparición de enfermedades en la piel. No olvides aplicar tanto en tu rostro como en tu cuerpo aftersun para que tu piel mantenga los antioxidantes y la hidratación diaria necesaria.
Revisa periódicamente la aparición o cambios en los lunares (de forma, tamaño o color). Si tomas medicamentos fotosensibilizantes o tienes alguna patología cutánea, el seguimiento de estas recomendaciones es especialmente importante. En todo caso, si tras la exposición solar te aparecen ampollas, fiebre o dolor de cabeza, consulta con tu médico.