Descripción
Sérum facial hidratante diseñado para el cuidado de la piel con acción antienvejecimiento. Formulado a base de extracto de baba de caracol orgánica y extracto de aloe vera. Ayuda a rellenar las líneas de expresión y a suavizar los rasgos estresados y cansados para conseguir un aspecto rejuvenecido. Enriquecida con extractos orgánicos de caléndula. El extracto de baba de caracol, es rico en alantoína, colágeno, elastina, ácido glicólico y vitaminas, favorece la redefinición del contorno facial y a regenerar la piel. Sin parabenos con ingredientes procedentes de la agricultura biológica. Indicado para todo tipo de pieles.
Modo de empleo
Aplicar sobre la piel limpia con suaves toques.
Composición
SNAIL SECRETION FILTRATED EXTRACT, ALOE BARBADENSIS LEAF EXTRACT*, GLYCYRRHIZA GLABRA (LICORICE) ROOT EXTRACT, CALENDULA OFFICINALIS FLOWER EXTRACT*, HYDROLYZED COLLAGEN, ALLANTOIN, RETINYL PALMITATE, ASCORBYL PALMITATE, TOCOPHERYL ACETATE, PANTHENOL, CITRIC ACID, MALIC ACID, TARTARIC ACID, INOSITOL, BIOTIN, RIBOFLAVIN, NIACINAMIDE, SODIUM CHONDROITIN SULFATE, DISODIUM EDTA, SODIUM HYDROXIDE, PEG-40 HYDROGENATED CASTOR OIL, CERATONIA SILIQUA GUM (CAROB BEAN GUM), TROPOLONE, SODIUM BENZOATE, POTASSIUM SORBATE, IMIDAZOLYDINYL UREA, CAPRYLYL GLYCOL, HYDROXYETHYLCELLULOSE, CELLULOSE, SODIUM ACETATE, ISOPROPYL ALCOHOL, 1-2 HEXANEDIOL, PARFUM (FRAGRANCE).
Consejo Farmacéutico
Para retrasar el fotoenvejecimiento de la piel es vital conocer nuestro exposoma. Como sabrás, la salud de tu piel depende, tanto de factores internos como externos, y estos últimos son los que engloba el exposoma. En concreto, la exposición a la radiación y a la contaminación, nuestros hábitos cotidianos, la nutrición, el estrés y el sueño. Todos estos factores tienen un gran impacto en la salud y la calidad de nuestra piel.
Para que un producto antiage se adapte a tus necesidades, deberá estar pensado para contrarrestar algunos de estos factores. Los demás, dependen de ti, por lo que recuerda tener una dieta equilibrada, hacer actividad física con regularidad, gestionar el estrés y dormir las horas necesarias para que tu piel también pueda descansar.